“Xalar”, el verbo catalán sinónimo de disfrutar con alegría, ha servido de inspiración a Isabel Cruz (anteriormente responsable del Bar Mundial del Born) a la hora de bautizar a su restaurante La Xalada, un guiño a la locura que da sentido a toda su vida y, por qué no decirlo, a la de muchos a los que nos gusta vivir la vida de la mejor manera: riendo, emocionándonos con pequeñas cosas del día a día o reuniéndonos alrededor de una buena mesa con amigos. Es precisamente esto último lo que nos llevó a acercarnos hace unos días al número 1 de la Calle Parlament, donde encontramos la fórmula perfecta para despedir a unos amigos que se han ido a vivir a Londres.
La Xalada ocupa una esquina del barrio de Sant Antoni, un espacio luminoso, vestido con grandes ventanales y dividido en dos plantas. ¿Qué decir de la decoración? Es un reflejo total de la alegría que desprende su dueña, una recolección de momentos familiares y pasiones. Su devoción por los espejos, las lámparas de vela,las antigüedades o las flores se palpa en cada rincón del restaurante. En el piso de arriba, encontramos lo que Isabel llama “el rincón de la abuela”,en memoria de aquél lugar en casa de su madre y fotos familiares cuelgan en la pared.
La cocina está bajo el mando de Gabriel González. En ésta sólo se trabajan productos de temporada y, siempre que se pueda, ecológica y de proximidad, tan de proximidad que procuran abastecerse, en mayor medida, de los artesanos del barrio Sant Antoni. La carta se compone de una amplia selección de tapitas para el vermut, platillos para picar y “xalar”, ensaladas y platos marineros (a los que ellos llaman La Mar Xalada). Una buena variedad y ¡un gran deleite para nuestro estómago!
Estos son algunos de los platos que degustamos, todos deliciosos y cantidades realmente generosas. El único que nos decepcionó un pelín fueron los mejillones al vino, la salsa estaba deliciosa pero los moluscos estaban algo faltos de sabor.
La Xalada
Parlament, 1
Precio aproximado 30-35€ por persona
¡Buen provecho!